El jueves, Salman Rushdie, el novelista británico, fue atacado y apuñalado varias veces con un cuchillo por extremistas islamistas que apoyan al régimen iraní (en su línea de tiempo de Twitter) en el norte del estado de Nueva York. La policía anunció la identidad del atacante, pero aún no se han hecho públicos los detalles. Independientemente de quién sea el atacante, y de si actuó solo o este ataque fue organizado, el instigador y el verdadero responsable de este reprobable acto, fueron el régimen iraní y su líder supremo. El atacante de Nueva York se limitó a aplicar el decreto del líder supremo del régimen iraní, y se sintió alentado por la oferta del régimen de una cuantiosa recompensa mundana, y un lugar en el "cielo".

El decreto en cuestión para matar a Rushdie fue emitido en febrero de 1989, por el entonces líder supremo del régimen iraní, Ruhollah Jomeini. Alí Jamenei, el actual líder supremo, y otros dirigentes del régimen, siempre habían prometido aplicar esta fatwa antiislámica en los últimos 34 años, y fijaron una recompensa millonaria por este acto terrorista.

La fatwa en cuestión ha sido uno de los signos más claros del patrocinio estatal del terrorismo por parte del régimen iraní, que no se priva de impulsar el acto terrorista en sus medios de comunicación oficiales. Un vistazo a los medios de comunicación estatales un día después del atentado, lo dice todo.

La gran pancarta en la oración del viernes en Teherán decía que el veredicto de ejecución de Salman Rushdie debe implementarse y se llevará a cabo.

En un artículo detallado del 12 de agosto de 2022, la agencia de noticias estatal Fars escribió: "El martes 15 de febrero, el imán Jomeini, que Dios tenga piedad de él, emitió una fatwa sobre la apostasía de Salman Rushdie, y la necesidad de su eliminación...".

"El ayatolá Jamenei, el presidente de la época, durante una entrevista radiofónica en la que celebraba la fatwa del Imán, ... dijo: Esta es una sentencia que todos los juristas islámicos deberían dar la misma sentencia, si quieren actuar de acuerdo con las normas islámicas. Esta fatwa es definitiva. Es decir, la persona que comete tal error, está ciertamente condenada a muerte, y es obligatorio eliminarla del mundo...”

"La Fundación 15 Khordad también anunció que había fijado un millón de dólares como recompensa por el asesinato de Salman Rushdie. Años más tarde, Hassan Sanei, el director de la fundación, dijo que ofrecía directamente la recompensa por el asesinato de Salman Rushdie al Imán, y el Imán rezó".

La resistencia iraní, en un comunicado, condenó enérgicamente el atentado, el cual "tuvo lugar por instigación de la fatwa de Jomeini".

"El despiadado intento de asesinato de Salman Rushdie con la fatwa de Jomeini/Khamenei, es la clara brutalidad del régimen de los mulás antiislámicos. Rafsanjani, Khatami y Rouhani aprobaron la fatwa. Sus funcionarios, como Mohajerani, alientan la violencia/el terrorismo, promoviendo al régimen de los mulás que gobierna Irán, debe ser desterrado de las Naciones Unidas, y sus agentes sometidos a juicio y expulsados", tuiteó Mohammad Mohaddessin, presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores del NCRI.

"La masacre de periodistas en sus mesas de trabajo, los disparos a civiles indefensos, la ejecución de los heridos, la toma de rehenes, el terror a los ciudadanos de a pie y la justificación de la realización de crímenes contra la humanidad, bajo la bandera del Islam, han herido la conciencia del mundo. El espíritu del Islam rechaza estas acciones con la mayor repugnancia. Este tipo de terrorismo y barbarie se inició hace varios años, con la fatwa de Jomeini para matar al escritor Salman Rushdi, a los editores y traductores de su libro".

The world will not experience calm unless the barriers are removed from the Iranian people’s path to regime change in Iran. The epicenter of the export of terrorism and fundamentalism must be eliminated.

Salman Rushdiehttps://t.co/ns2WOLvez8 pic.twitter.com/AayFkUV6WL

— Maryam Rajavi (@Maryam_Rajavi) August 12, 2022

"La fatwa de Jomeini (sobre el asesinato de Salman Rushdie), es la exportación del terrorismo a nivel internacional. El propio Jomeini es el mayor enemigo del Islam en la historia contemporánea”.

"Jomeini es el peor enemigo del Islam, del Corán y del Profeta. Jomeini merece ser castigado más que cualquier otro criminal de este mundo, por sus acciones criminales y antiislámicas”.

"Cuando Jomeini dicta sentencias de muerte a los nacionales de otros países, se puede entender claramente lo que ha hecho al pueblo y a los niños de Irán, en sus cárceles en Irán”.

"Hoy está claro para todos que, las esperanzas de moderación o transformación de este régimen son falsas, e ingenuas".

El ataque de hoy contra Salman Rushdie y otros actos terroristas del régimen iraní, como el complot para asesinar al embajador John Bolton, indican que la política occidental y estadounidense de apaciguamiento y negociación con este régimen forajido y patrocinador del terrorismo, ha fracasado. El régimen es débil y frágil ante las revueltas internas e inseguro al tratar de mantener su base social, la cual se está derritiendo, por lo que actúa continuamente de forma más violenta y peligrosa a escala internacional, para levantar la moral de sus fuerzas con actos terroristas.

Debido a la política de apaciguamiento, los mulás confían en que estos actos no tendrán consecuencias graves para ellos.  Durante demasiado tiempo, Occidente ha hecho la vista gorda ante la violación de los derechos humanos, por parte del régimen en su país, y su terrorismo en el extranjero.

Occidente debe entender que, el régimen fascista religioso de Irán nunca retrocederá ante el compromiso, la sumisión y las concesiones; esto sólo lo envalentonará, como ha hecho en las últimas cuatro décadas. Este régimen sólo entiende un lenguaje, y es la firmeza. Por lo tanto, si Europa y Estados Unidos quieren que el régimen iraní escuche su mensaje, deben adoptar una política firme hacia los mulás.