Últimos argumentos del abogado del MEK en el juicio del agente iraní Hamid Noury

By Amigos españoles de Irán libre - mayo 04, 2022


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 El lunes 2 de mayo, Kenneth Lewis, abogado de los demandantes de la Organización Popular Mojahedin de Irán (PMOI/MEK) en el caso de Hamid Noury, presentó sus argumentos finales en un tribunal de Estocolmo, Suecia, donde Noury, uno de los autores de la masacre de presos políticos iraníes de 1988, está siendo juzgado por crímenes contra la humanidad.


Durante la sesión, Lewis confirmó los argumentos de los fiscales y otros abogados de los demandantes sobre la culpabilidad de Noury por los crímenes cometidos en 1988. También presentó al tribunal nuevos aspectos del caso. En primer lugar, hizo una breve historia de la PMOI/MEK y de su lucha contra la dictadura del Sha y por la defensa de la libertad en Irán. A continuación, Lewis describió la época de la Revolución de 1979 y la llegada al poder de los mulás, tras la cual el nuevo régimen comenzó a reprimir a las mujeres, a las minorías étnicas y religiosas y a los partidos políticos. Lewis dijo que Ruhollah Jomeini, el primer líder supremo del régimen de los mulás, ordenó la detención y el asesinato de los miembros y simpatizantes del PMOI/MEK en los primeros años después de la revolución.

Kenneth Lewis presentó el contexto histórico de la manifestación del 20 de junio de 1981 en Teherán, en la que medio millón de personas salieron a la calle y fueron fusiladas por la Guardia Revolucionaria del régimen (IRGC). Tras la ejecución de varios jóvenes miembros del PMOI/MEK después de la manifestación, las autoridades del régimen publicaron varias fotos de las víctimas en los periódicos estatales y pidieron a quien pudiera identificarlos que acudiera a la fiscalía del régimen.

Lewis proporcionó detalles de los crímenes cometidos por los mulás contra los miembros del PMOI/MEK y sus partidarios en todo el mundo, dejando claro que el régimen considera al PMOI/MEK su principal enemigo histórico, político e ideológico. El régimen gobernante en Irán está decidido a aniquilar completamente al PMOI/MEK, y las detenciones, torturas y ejecuciones se basan en una política adoptada desde que Jomeini llegó al poder, continuada por su fatwa de 1988, y mantenida mientras hablamos.


En la época de la masacre de presos políticos de 1988, Noury era una de las autoridades penitenciarias de la prisión de Gohardasht, en Karaj.

Durante el proceso judicial, Noury negó la masacre de 1988 y su presencia en la prisión de Gohardasht en contra de todas las pruebas presentadas. Intentó presentar la masacre de miles de prisioneros como "mentiras y propaganda del MEK y los comunistas". Intentó presentarse como un actor menor que no participó en las ejecuciones.

Sin embargo, muchos de los testigos que declararon ante el tribunal sueco ofrecieron relatos desgarradores sobre cómo Noury y otras autoridades del régimen enviaron a decenas de prisioneros a la horca simplemente por negarse a retirar su apoyo al PMOI/MEK. En ese momento, unos 30.000 prisioneros fueron ejecutados en todo Irán en cuestión de meses. Los testigos también hablaron del papel protagonista del presidente del régimen, Ebrahim Raisi, al procesar a los presos en juicios que duran minutos sin acceso a abogados y enviarlos inmediatamente a la cámara de ejecución.

 


"El actual régimen gobernante en Irán ha ejecutado a cientos de miles de miembros y partidarios del PMOI/MEK por sus creencias religiosas y políticas.  El PMOI/MEK ha publicado los nombres y las características de aproximadamente 20.000 de estas víctimas. Muchos se han referido a este libro en varias ocasiones. Otros miembros del PMOI/MEK y del Consejo Nacional de Resistencia de Irán fueron asesinados en el extranjero, en Suiza, Italia, Turquía, Pakistán e Irak. Sólo en Irak han muerto 141 miembros de la PMOI/MEK", afirma Lewis.

"No hay duda de que desde la década de 1980 en adelante, la gran mayoría de la población iraní ha sido oprimida por el régimen de los mulás, y esto incluye a los partidarios del PMOI/MEK. La mayoría de ellos fueron detenidos y condenados en 1981 y 1982 por sus creencias religiosas y políticas, distribuyendo periódicos, participando en manifestaciones y recogiendo dinero para su organización", añadió el Sr. Lewis.

"Hay innumerables informes de que estos presos políticos detenidos no sólo fueron agredidos sino también torturados. Hemos oído hablar mucho de los latigazos con los pies y otros tipos de tortura. Esto incluye los simulacros de ejecución y las cámaras de gas descritas por nuestros testigos y denunciantes. Algunos fueron incluso obligados a presenciar la ejecución de otros, y las mujeres fueron violadas. Hay fotos horribles que muestran las marcas dejadas en los pies de los que fueron azotados. No había tribunales internacionales, no tenían abogados y no tenían la oportunidad de objetar o apelar. No hubo ninguna solicitud de apelación ni de objetivos, aunque el Sr. Raisi y otros funcionarios del régimen afirmaron que se les había dado el debido proceso. No ha habido tal cosa", dijo Lewis.


El abogado de la PMOI/MEK continuó su argumento con más explicaciones sobre la masacre de 1988, leyendo segmentos del telegrama enviado por el líder de la Resistencia iraní, Massoud Rajavi, al Secretario General de la ONU en septiembre de 1988 sobre la masacre de miles de presos políticos por orden de Jomeini. Lewis proporcionó detalles de las órdenes de Jomeini que iniciaron la masacre de los miembros del PMOI/MEK que eran firmes en sus creencias políticas. Lewis proporcionó detalles de las órdenes de Jomeini que iniciaron la masacre de los miembros del PMOI/MEK que eran firmes en sus creencias políticas.

"Los motivos de la masacre fueron expuestos en las órdenes de Jomeini, llamadas fatwa. En este texto, Jomeini llamaba a los miembros de la PMOI/MEK 'enemigos de Dios' que debían ser ejecutados", explicó Lewis, que pasó a describir brevemente el número de mujeres miembros de la PMOI/MEK en las cárceles iraníes. En la prisión de Gohardasht, situada en Karaj, al oeste de Teherán, fueron ejecutadas todas las mujeres miembros del PMOI/MEK en la masacre de 1988.



En el segmento final de su argumento, Kenneth Lewis aportó pruebas contundentes que demuestran que los asesinatos y la masacre de presos políticos, especialmente el genocidio contra el PMOI/MEK, se planificaron meses antes de la Operación Luz Eterna de agosto de 1988, y que la orden de Jomeini ya estaba emitida. Lewis también mencionó el papel directo de Hamid Noury en las ejecuciones y torturas de presos políticos, e incluso la agresión a mujeres miembros de la PMOI/MEK en la prisión de Gohardasht. Por último, Lewis respaldó la petición de los fiscales suecos de condenar a Hamid Noury a cadena perpetua.

"Quiero que Hamid Noury sea condenado como agresor y criminal sobre la base de la acusación. No era una figura sin importancia. De hecho, fue una figura clave... que desempeñó un papel importante en las ejecuciones, y sabemos que era plenamente consciente de lo que estaba haciendo en ese momento", concluyó Lewis.

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