Artículo fuente

El gabinete del presidente del régimen iraní, Ebrahim Raisi, ha prometido reducir los dilemas económicos del país y los problemas de subsistencia de la población y reactivar la economía del país.

Sin embargo, los medios de comunicación estatales, al tiempo que citan el Centro de Estadísticas del régimen y las cifras oficiales del gobierno, informan de que las afirmaciones de Raisi y los miembros del gabinete son falsas, y que no sólo no ha mejorado la economía del país ni los medios de vida de la población, sino que han aumentado la inflación y los precios de los productos básicos.

"A principios de noviembre, el aumento de los precios de los alimentos y las bebidas en el país en los 12 meses hasta octubre de este año, en comparación con el mismo periodo del año anterior (inflación anual), fue del 61,4%, lo que supone un nuevo récord de inflación alimentaria. Esta inflación y cifra puede calificarse de "hiperinflación" y ha superado los límites de la inflación normal. El cruce del umbral de 280.000 riales por el dólar estadounidense significa una alarma que debe ser escuchada", según un informe del 14 de noviembre del diario estatal Etemad.

"Según los informes publicados por el Centro de Estadística de Irán, la inflación en octubre se anunció en un 45,4%. Estas cifras muestran una inflación asombrosa sobre el papel, pero lo más aterrador de este fenómeno se percibe en la vida cotidiana de millones de personas, especialmente en las grandes ciudades. El coste desorbitado de los alimentos y los suministros, los alquileres astronómicos, los gastos de viaje, el aumento desorbitado de los costes de la sanidad... todo ello ejerce una enorme presión sobre la clase media", según un informe del 16 de noviembre del diario estatal Mostaghel.

De la misma manera, el diario estatal Mardomsalari publicó un artículo titulado: "Los precios de los productos suben un 79%, superando el nivel crítico". El artículo dice lo siguiente: "Un estudio de la tabla de precios de algunos artículos en comparación con la tendencia de los cambios con los límites deseados muestra que en octubre, el precio medio de alrededor del 79% de los artículos seleccionados, incluyendo el arroz iraní de primera clase, el arroz extranjero de primera clase, las aves de corral, la leche pasteurizada, el yogur pasteurizado, El queso pasteurizado iraní, los huevos, la mantequilla pasteurizada, el aceite vegetal de cocina, los plátanos, las manzanas, las naranjas, los pepinos, las patatas, las judías pintas, las lentejas y el azúcar, así como el té extranjero, están fuera del rango de precios críticos", según un informe del 16 de noviembre del diario estatal Mardomsalari.

Sin embargo, la situación económica es tan grave que el régimen, incluso a través de sus propias estadísticas oficiales, se ve obligado a reconocer que las condiciones están ahora "más allá de la crisis".

"Una de las promesas hechas por el gabinete de Raisi fue la de abordar inmediatamente los problemas económicos de los sectores vulnerables de nuestra sociedad. Sin embargo, el aumento diario de los precios durante sus primeros 100 días en el poder no muestra ninguna perspectiva clara de mejorar los medios de vida de los pobres. Ahora que se va a suprimir el tipo de cambio preferencial, los precios vuelven a dispararse en todos los ámbitos, y aunque los subsidios directos aumentan, los pobres siguen siendo considerados extremadamente vulnerables", según un informe publicado el 14 de noviembre por el diario estatal Etemad.

La situación de los pobres y vulnerables en Irán es tal que la calidad de los alimentos ya no les importa, y simplemente tratan de conseguir comida y satisfacer sus necesidades diarias.

La situación indica que muchos sectores de la sociedad iraní han cruzado la línea de la pobreza absoluta y han llegado a la línea de la "supervivencia" mientras intentan desesperadamente salir con vida de ella.

La raíz de esta situación está clara, incluso según los expertos del gobierno, siendo la corrupción institucionalizada y estructural. Así, cada proyecto y plan económico en Irán, a pesar de su cantidad y calidad, se convierte en una fuente de renta y saqueo para los funcionarios del gobierno.

"Se han distribuido por todo el país hasta 55.000 millones de dólares de divisas basadas en el tipo de cambio preferencial (1 dólar = 42.000 riales)", pero el resultado no ha sido una reducción de los precios y, en relación con esto, ha provocado "muchos casos de corrupción rentística y económica", según Mohsen Zanganeh, miembro del Majlis (parlamento) del régimen.

(Nota: el tipo de cambio del dólar estadounidense en el mercado abierto es de 280.000 riales).

"El tipo de cambio preferencial se ha utilizado para proporcionar hasta 8.000 millones de dólares en siete partidas de productos básicos. Desde principios de 2021, el gabinete [del ex presidente del régimen Hassan Rouhani] y [el gabinete de Raisi] han utilizado la cantidad total de 8.000 millones de dólares para proporcionar siete artículos de bienes basados en el tipo de cambio preferencial", añadió Zanganeh, según un informe del 6 de noviembre de la agencia estatal Eghtesad Online.

Si este dinero se hubiera gastado en bienes básicos para la población y se hubiera distribuido en el mercado sobre la base del tipo de cambio de 42.000 riales por dólar, seguramente los precios no se habrían disparado en todo Irán.

Sin embargo, en lugar de comprar bienes, el dinero (8 y 55 mil millones de dólares) está siendo robado por los rentistas del gobierno, y los bienes que importaron fueron vendidos a la población a un precio varias veces mayor.

En consecuencia, el camino económico que se abre ante el régimen de los mulás conducirá a un callejón sin salida y a una escalada de tensiones sociales que conllevan peligros potenciales para el futuro del régimen. Esta realidad innegable ha quitado el sueño a muchos de los altos cargos del régimen.