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El infame presidente sirio, Bashar Assad realizó una breve visita a Teherán el día domingo 8 de mayo, y se reunió con el líder supremo iraní Alí Jamenei y el presidente Ebrahim Raisi, de acuerdo con los medios de comunicación iraníes y sirios. Se trata de la segunda visita de Bashar Assad a Irán desde el inicio de la guerra civil siria en 2011. Teherán ha respaldado constantemente al régimen de Damasco proporcionando apoyo financiero y militar durante los 11 años de conflicto. La última visita de Assad a Irán de la que se tiene noticia fue en febrero de 2019.

Sobre el dictador sirio

Bashar Hafez al-Assad es un político sirio, nacido el 11 de septiembre de 1965, actualmente es el decimonoveno presidente de Siria, puesto que ocupa desde el 17 de julio del año 2000. Así mismo, es el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas sirias y secretario general del Mando Central del Partido Socialista Árabe Baaz. Su padre, Hafez al-Assad, ocupó la presidencia de Siria antes que él, de 1971 a 2000. Tras su muerte, el 10 de junio de 2000, la constitución siria fue modificada, reduciendo la edad mínima permisible para tomar la presidencia, de 40 a 34 años, que era la edad de Bashar en ese momento. Assad fue confirmado como presidente el 10 de julio de 2000. Poco después de llegar al poder, Assad "convirtió el vínculo de Siria con Hezbolá, y sus patrocinadores en Teherán, en el elemento central de su doctrina de seguridad". En su política exterior, Assad critica abiertamente a Estados Unidos e Israel.

El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (SOHR por sus siglas en inglés), un grupo de vigilancia con sede en el Reino Unido y con una red de fuentes sobre el terreno, había contabilizado la muerte de 494.438 personas hasta junio de 2021. Indicó que al menos 159.774 civiles habían muerto, siendo el gobierno sirio y sus aliados, los responsables de la mayoría de estas muertes. Más de la mitad de los 22 millones de habitantes de Siria previos a la guerra, han huido de sus hogares. Unos 6,9 millones son desplazados internos, de los cuales más de dos millones viven en campamentos, en tiendas de campaña con acceso limitado a los servicios básicos. Otros 6 millones son refugiados o solicitantes de asilo en el extranjero.

En los frentes financiero y militar, Irán ha apoyado sin fisuras al dictador sirio Bashar Assad. En una entrevista concedida a Etemad Online, Heshmatullah Falahatpisheh, miembro de la Comisión de Seguridad Nacional del parlamento, habló de su visita a Siria y dijo: “Repito, hemos dado tal vez entre 20.000 y 30.000 millones de dólares a Siria, y tenemos que recuperarlos de este país. El dinero de esta nación se ha gastado allí”.

La influencia económica de Irán sobre Siria también ha crecido en los últimos años, ya que Teherán ofrece líneas de crédito al gobierno de Damasco, mientras las empresas iraníes obtienen lucrativos contratos comerciales. Sin embargo, se sabe que las milicias proxy de Irán, incluida la libanesa Hezbolá, han prestado apoyo activo a las fuerzas gubernamentales sirias en el conflicto.

Bashar al-Assad llegó a Teherán en un viaje secreto y sin previo aviso, se reunió con el jefe de la dictadura religiosa iraní, Jamenei, y posteriormente con el presidente. Según los medios de comunicación estatales iraníes, la reunión tuvo lugar el domingo 8 de mayo. Sin embargo, sólo se anunció cuando Bashar al-Assad regresó a Siria. Según la televisión estatal iraní, Jamenei dijo a Assad que “Siria no es hoy lo que era antes de la guerra... pero el respeto y el prestigio de Siria son mayores que antes, y todo el mundo ve a este país como una potencia.”

Assad fue citado, diciendo que "los lazos estratégicos entre Irán y Siria han impedido la dominación del régimen sionista [Israel] en la región". También se citó a Assad señalando que la fuerte relación entre Irán y Siria servía para frenar la influencia estadounidense en Oriente Medio. "Estados Unidos es hoy más débil que nunca", apuntó la agencia estatal de noticias siria SANA citando a Assad. "Debemos seguir este camino", añadió y alabó la ayuda de Irán en la "lucha contra el terrorismo" de Siria. El presidente iraní Raisi señaló en su reunión con Assad que la prioridad de su gobierno era reforzar los lazos estratégicos con Siria.

Según Associated Press, la presencia de Bashar al-Assad en Teherán se produjo mientras las fuerzas de seguridad iraníes estaban fuertemente presentes en las calles y plazas de la capital el domingo, en medio del temor a posibles disturbios por la subida de los precios del pan, así como la escasez de muchos bienes de consumo básicos. Durante las recientes protestas contra las condiciones económicas y de vida, el pueblo iraní pidió a los dirigentes del gobierno que abandonaran la ayuda a Siria y a otros extranjeros, y destinaran los recursos financieros del país al pueblo iraní.

El régimen iraní necesitaba un viaje de este tipo para mostrar su poder, dentro de una situación en la que la política interna del líder supremo, Alí Jamenei, y de su presidente, Ebrahim Raisi, ha sido muy cuestionada por la población y por algunas facciones del gobierno. Tras la reciente visita de Assad a los Emiratos Árabes Unidos, Jamenei se mostró muy preocupado, por el hecho de que los países árabes intenten acercar el régimen sirio al bloque árabe a costa de distanciarlo de Irán. Por lo tanto, no es descabellado ver que la primera petición de Jamenei a Bashar al-Assad fue no dejar que las relaciones entre ambos países se debiliten.

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Intervención en la conferencia "La necesidad de una política firme contra el régimen de los mulás

The ruling by the Court of Appeal in Antwerp, the clerical regime’s decisive defeat
Maryam Rajavi’s speech to the international conference after the final ruling by the Court of Appeals in Belgium #Iran #BlacklistMOIS https://t.co/fdTZeWnK2N

— Maryam Rajavi (@Maryam_Rajavi) May 10, 2022

Aquí está el discurso de apertura de esta conferencia:

Mis queridos compatriotas,

Personalidades destacadas,

Señoras y señores del Colegio de Abogados,

Queridos amigos,

Amigos y partidarios de la resistencia iraní,

La decisión de hoy del Tribunal de Apelación de Amberes marca la derrota decisiva de la dictadura religiosa en Irán.

Felicito al heroico pueblo de Irán, a los Muyahidines del Pueblo, al Consejo Nacional de la Resistencia de Irán y a Massoud [Rajavi], el líder de la Resistencia, por esta gran victoria del pueblo y de la Resistencia contra los aparatos de inteligencia y "justicia" de los verdugos y contra toda la dictadura religiosa y terrorista que gobierna Irán.

El diplomático terrorista del régimen de los mulás ya había sido condenado a 20 años de prisión.

La decisión del Tribunal de Apelación aumenta en tres años la pena de uno de los mercenarios infiltrados, condenado a 18 años de prisión. Los otros dos agentes fueron condenados a 18 y 17 años de cautiverio respectivamente.

Se les retiró definitivamente la nacionalidad belga y se les caducó el pasaporte. Cada uno fue condenado a pagar 60.000 euros.

De este modo, se destruyen 46 meses de presiones del régimen iraní para librarse de una fuerte condena judicial por su complot terrorista contra la Resistencia Popular Iraní.

Este es el fracaso de Jamenei, Rohani y Raissi, que quisieron convertir su recurso a las operaciones terroristas en un derecho inalienable abusando de la inmunidad diplomática. Pero la justicia belga dijo no a su increíble arrogancia.

Ya es hora de que los gobiernos occidentales y el mundo digan no al régimen en su totalidad, y reconozcan el derecho del pueblo iraní a la libertad y al derrocamiento del régimen de los mulás.

En mi testimonio de 7 horas en noviembre de 2019, expliqué la cadena de decisiones de los dirigentes del régimen en el Consejo Supremo de Seguridad de los mulás con respecto a este atentado y declaré que la misión de ejecución fue confiada al Ministerio de Inteligencia (VEVAK) en colaboración con el Ministerio de Asuntos Exteriores del régimen.

Hoy insisto en que es necesario juzgar a los autores, pero esto no es suficiente. Los principales autores y patrocinadores, es decir, Jamenei, su presidente y sus entonces ministros de Asuntos Exteriores e Inteligencia y otros líderes del fascismo religioso sentados en el Consejo Supremo de Seguridad Nacional del régimen deben ser llevados ante la justicia, sin excepción, de lo contrario se volverán aún más arrogantes.

Durante cuatro décadas, esta gente ha cometido innumerables crímenes terroristas, ha masacrado a 1.500 manifestantes en noviembre de 2019, ha ejecutado a 120.000 presos políticos, incluidos 30.000 en 1988, y ha saqueado los bienes y recursos del pueblo iraní. Como siempre, recurren a la presión, el chantaje y el regateo, pero hay que darles una respuesta firme: sus casos deben ser remitidos al Consejo de Seguridad de la ONU, al tribunal internacional y, por el tribunal en nombre del pueblo en un Irán libre.

Queridos amigos,

Cualquiera que quiera apreciar la hostilidad de este régimen hacia la humanidad debe examinar el caso de este complot terrorista. Es una masacre a gran escala que ha sido planificada. La decisión del Tribunal de Apelación y la investigación llevada a cabo durante varios años no dejan lugar a dudas de que la trama de la bomba podría haber sido la acción terrorista más mortífera de Europa.

Con este plan, el más alto nivel de la dirección del régimen, es decir, Jamenei, quería imponer al mundo la supervivencia de su podrido poder.

La complacencia occidental ha proporcionado un refugio político al terrorismo de los mulás

La pregunta es: ¿por qué el régimen desarrolló un plan que suponía grandes riesgos políticos? ¿Cuál era exactamente su cálculo político?

La respuesta es que, en primer lugar, los mulás se ven en una posición de debilidad y posible derrocamiento . Por eso se embarcan en aventuras descabelladas.

Jamenei, mejor que nadie, es consciente del grado de putrefacción de su régimen, y teme más que nunca a la alternativa democrática a su régimen, a saber, el Consejo Nacional de Resistencia de Irán (CNI) y los Muyahidines del Pueblo de Irán (PMOI/MEK).

En segundo lugar, los mulás se apoyan en la política de complacencia de los gobiernos occidentales. Durante más de tres décadas, la política de apaciguamiento ha servido de refugio político al terrorismo del régimen iraní.

Por lo tanto, ¡no hay que preguntar a esta tiranía sanguinaria cuáles son las líneas rojas de sus operaciones terroristas fuera de Irán! Más bien habría que preguntar a quienes han permanecido callados y pasivos ante este régimen, ¿cuáles son sus líneas rojas?

Desde el acuerdo nuclear con los países del P5+1 en 2015, el régimen se ha acelerado de golpe en materia de misiles balísticos y nucleares, beligerancia en la región y terrorismo.

Más concretamente en el caso del terrorismo, el régimen, que había mantenido un perfil bajo tras la decisión del tribunal de Mykonos en 1997, ha vuelto a cometer decenas de actos terroristas, algunos de ellos en Estados Unidos y países europeos tras el giro del acuerdo nuclear, por no hablar de sus operaciones en Irak, Siria o Yemen.

La investigación detallada de varios años proporciona información y comprensión en profundidad de la operación neutralizada. Para que nadie pueda albergar la ilusión de que las operaciones terroristas del régimen fuera de sus fronteras son obra de elementos arbitrariamente aislados.

Al igual que la represión, el terrorismo es el terreno común de todas las facciones del régimen. El anterior presidente del régimen y su gobierno participaron en la adopción de todos los delitos terroristas decididos en el Consejo Supremo de Seguridad Nacional de los mulás. El ex ministro de Asuntos Exteriores del régimen ha reconocido claramente que la estructura de su ministerio y sus embajadas es segura. Es bien sabido que recibía órdenes del verdugo Qassem Soleimani, [antiguo jefe de la fuerza terrorista Qods].

Ahora que Jamenei ha expulsado por completo a esta facción, su régimen está unificado. Su ministro de Asuntos Exteriores resulta ser el títere de la fuerza terrorista Qods.

En otras palabras, la política exterior de este régimen está al servicio del terrorismo y su terrorismo es el instrumento de su política exterior.

Ya nadie puede pretender que exista el más mínimo atisbo de esperanza de cambio en la política y el comportamiento de esta tiranía religiosa.

Ya nadie puede dudar de lo que la Resistencia iraní ha declarado, a saber, que la existencia del régimen depende del terrorismo y que no puede renunciar a él ni un solo día.

Massoud [Rajavi, el líder de la Resistencia iraní] ha declarado que "el belicismo, la exportación del oscurantismo y el terrorismo han sido los escudos protectores y las necesidades de supervivencia de la dictadura religiosa desde el principio".

¿Continuar la complacencia con los mulás o estar al lado del pueblo iraní?

La complacencia con el régimen nunca ha estado tan carente de justificaciones y excusas.

¿Qué más necesitan para acabar con su silencio e inacción?

Les decimos:

No mires a Irán a través del prisma de un puñado de mulás, criminales y ladrones pasdaran sentados en los palacios de cristal del poder. La sublevación y el ascenso de la resistencia popular están al acecho.

Invertir en el régimen clerical va en detrimento de la paz y la tranquilidad regionales y mundiales y perjudica los intereses del pueblo iraní.

No ate el destino de Europa a los mulás terroristas. En su lugar, apoyen al pueblo iraní y su lucha por derrocar este régimen y establecer la libertad y la paz. ¡Abandona la política que ignora los derechos humanos! Dejen la complacencia en la sección de las vergüenzas del museo de la historia para que las generaciones futuras aprendan de ella como camino a no seguir.

No permitas que Jamenei y la Guardia Revolucionaria reciban dinero.

Cada barril de petróleo comprado a este régimen y cada dólar entregado a los mulás se convierte en una bala disparada contra los manifestantes indefensos y desarmados. Los mismos valientes manifestantes que hoy protestan en las ciudades de la provincia de Khuzestan contra el alto coste del pan, contra la subida vertiginosa de los precios de las necesidades más básicas de la vida, y que de hecho atacan a todo el régimen. Saludemos el valor de estos iraníes.

El caso del terrorismo de los mulás debe ser tratado por el Consejo de Seguridad

La sentencia del Tribunal de Apelación de Amberes debe servir de pilar para allanar el camino hacia una firmeza general contra el terrorismo sin fronteras, a la que no se engaña ningún organismo oficial europeo, pero ante la que todos se mantienen de brazos cruzados.

Tras las condenas definitivas del diplomático-terrorista y de sus tres cómplices, retrasar la adopción de una política firme sólo alentará al fascismo religioso de Irán a continuar e intensificar el terrorismo.

La inacción ante las violaciones de los derechos humanos y los crímenes del régimen dentro y fuera de Irán, con el pretexto de las negociaciones nucleares, sería un grave error, un signo de debilidad que da al régimen más incentivos para obtener la bomba.

Es hora de que las autoridades judiciales y policiales de varios países, especialmente de Europa y Estados Unidos, pongan fin a su silencio y a su falta de responsabilidad;

Acabar con su silencio y ceguera ante decenas de operaciones terroristas del régimen e iniciar un proceso tras otro;

Revelar toda la información, documentos y nombres contenidos en los cuadernos encontrados en Assadi;

Los servicios europeos deben desenmascarar las células durmientes de la inteligencia de los mulás y la fuerza terrorista Qods de los pasdaran;

Hay que cerrar los nidos de espionaje y terrorismo de los mulás;

Las relaciones políticas y económicas con este régimen deben estar condicionadas al cese de las ejecuciones y de la exportación del terrorismo;

El Ministerio de Inteligencia y el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria deben ser catalogados como entidades terroristas, sus agentes y mercenarios deben ser juzgados, privados de la ciudadanía y expulsados.

Sin represión, sin asesinatos, sin terrorismo

Queridos amigos,

Ni la represión, ni las matanzas, ni el terrorismo han detenido ni detendrán a un pueblo que ha decidido liberarse. El pueblo iraní y su resistencia han decidido destruir la dictadura y el fascismo religioso.

Quisiera rendir un sincero homenaje a las eminentes personalidades políticas y parlamentarias de Europa y América que han participado en este caso y han desempeñado un papel fundamental en su desarrollo.

Por último, quiero saludar cordialmente a mis compatriotas y a los partidarios de la Resistencia iraní que, desde la detención de los terroristas del régimen y durante sus juicios, han celebrado numerosas manifestaciones para pedir al mundo que actúe con decisión contra el régimen y bloquee cualquier compromiso.

La última palabra es esa: los mulás no encontrarán una salida con la represión, el terrorismo y los complots. Los levantamientos en Irán, las valientes unidades de resistencia y el gran ejército de la libertad tienen la clave de la victoria y la libertad y acabarán inevitablemente con este régimen.

Se lo agradezco.

 

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El 4 de mayo, un tribunal de Estocolmo (Suecia) celebró la última vista del juicio contra Hamid Noury, funcionario del régimen iraní implicado en la tortura y el asesinato de miles de presos políticos. El tribunal emitirá su veredicto final el 14 de julio.
En el verano de 1988, el régimen llevó a cabo una completa purga en las cárceles bajo las órdenes del fundador del régimen de los mulás, Ruhollah Jomeini, ejecutando a más de 30.000 presos en cuestión de meses. La mayoría de las víctimas eran miembros y simpatizantes de la Organización Popular Mojahedin de Irán (PMOI/MEK).
En ese momento, Noury era fiscal adjunto de la prisión de Gohardasht, al oeste de Teherán. Participó activamente en la ejecución de presos políticos en esta prisión. Durante las 92 audiencias judiciales, muchos testigos describieron cómo Noury y otras autoridades del régimen, torturaban a los presos y los llevaban a una sala donde los ahorcaban en grupo.
La fiscalía sueca ha pedido cadena perpetua para Noury por cometer crímenes de guerra y asesinato durante la masacre de presos políticos iraníes de 1988. Los abogados de los demandantes del PMOI/MEK también han hecho una petición similar.
Los expertos esperan que el tribunal dicte una sentencia de cadena perpetua en julio.

Los iraníes amantes de la libertad de toda Europa se reunieron el miércoles en Estocolmo como continuación de una concentración que lleva nueve meses celebrándose, y para conmemorar el último día del juicio de Noury. Muchos de los manifestantes, en su mayoría partidarios de la oposición iraní PMOI/MEK, han participado en estas concentraciones de forma constante durante los últimos nueve meses para expresar las opiniones y demandas del pueblo iraní a la comunidad internacional. Entre ellas, el procesamiento de funcionarios del régimen implicados en violaciones de derechos humanos y crímenes contra la humanidad, como el líder supremo del régimen, Ali Jamenei, el actual presidente del régimen, Ebrahim Raisi, y otros.
Los familiares que perdieron a miembros de su familia en la masacre del verano de 1988 han superado todos los obstáculos y dificultades para asistir a estas reuniones, manteniendo viva la memoria de las víctimas y continúan siendo la voz, no sólo de los que perdieron la vida en las ejecuciones masivas de los años 80 y en la masacre de 1988 en todo Irán, sino también de los iraníes inocentes que son asesinados día a día por el régimen de los mulás.

En un mensaje de vídeo, la Sra. Maryam Rajavi, presidenta electa del Consejo Nacional de Resistencia de Irán (NCRI), elogió a los manifestantes por sus incesantes esfuerzos "para instar al mundo a que procese a los asesinos en masa que gobiernan en Irán por sus crímenes contra la humanidad, crímenes de guerra y genocidio".
La Sra. Rajavi recordó una breve historia del Movimiento por la Justicia y los esfuerzos de la resistencia iraní para llamar la atención sobre la masacre de 1988 durante las últimas tres décadas.
"Saludo a todos los que han hecho sacrificios y esfuerzos en este movimiento para pedir justicia durante las últimas tres décadas", dijo la Sra. Rajavi. "Esto incluye al profesor Kazem Rajavi y a todos los que han sido detenidos y torturados por reunir información sobre la masacre, presentar denuncias o protestar contra el régimen. También saludo a los presos de la PMOI y a los presos marxistas. Han dado testimonios precisos con detalles irrefutables sobre la masacre de 1988. Con un profundo sentido de la responsabilidad, han aportado así los documentos esenciales para la acusación del Fiscal".
La Sra. Rajavi reiteró que la investigación sobre el genocidio y los crímenes contra la humanidad debe extenderse a todas las prisiones de Irán.

Al mismo tiempo, en Ashraf 3, donde se encuentran los miembros del PMOI/MEK en Albania, se celebró una gran concentración en apoyo del Movimiento por la Justicia en Irán y para expresar la solidaridad con los manifestantes de Estocolmo. Varios supervivientes de la masacre de 1988 revivieron su tormento y sus penurias, recordando las atrocidades de las que fueron testigos en diversas prisiones de Irán, y el reducido número de funcionarios del régimen que participaban en la determinación de la suerte de cada preso político a través de tribunales "canguro" que sólo duraban unos minutos.
Los miembros del PMOI/MEK de Ashraf 3 expresaron su apoyo a la iniciativa, pidiendo a la comunidad internacional que haga responsable al régimen de los mulás, por las graves violaciones de derechos humanos, crímenes contra la humanidad, crímenes de guerra y el genocidio contra el pueblo iraní durante los últimos 43 años.

La masacre de más de 30.000 presos políticos en Irán en 1988 ha sido descrita como uno de los peores crímenes contra la humanidad desde la Segunda Guerra Mundial.
Un antiguo adjunto del Ministerio de Inteligencia iraní grabó en 2008 un vídeo en el que revelaba que el régimen de los mulás masacró a unos 33.700 presos políticos y los enterró en fosas comunes. Según Reza Malek, hay entre 170 y 190 fosas comunes en el país.
Más recientemente, Geoffrey Robertson QC, quien ha investigado en profundidad la masacre de 1988, ha subrayado que la masacre equivale a un "genocidio".
"Desde hace siglos es un delito matar a los presos. La diferencia es que si se trata de un delito concreto de genocidio, existe una convención internacional que obliga a los países a tomar medidas y castigar ese genocidio", dijo en una conferencia en línea a finales de agosto.
"Me parece que hay pruebas muy sólidas de que se trata de un genocidio. Se aplica al matar o torturar a un grupo determinado por sus creencias religiosas. Un grupo religioso que no aceptaba la ideología retrógrada del régimen iraní", añadió Robertson, refiriéndose a la fetua de Jomeini como base de la masacre.
"No hay duda de que el presidente del régimen, Ebrahim Raisi y otros deben ser procesados. Se ha cometido un delito de responsabilidad internacional. Hay que hacer algo al respecto, como se hizo contra los autores de la masacre de Srebrenica", reiteró.

Además, el último día del juicio de Noury, el régimen de los mulás de Irán anunció que el investigador iraní-sueco Ahmadreza Djalali ha sido condenado a muerte y que su ejecución tendrá lugar el 21 de mayo. Muchos creen que Teherán está presionando a Estocolmo para influir en la suerte de Noury y en el curso del juicio, sobre todo porque la decisión del juez está prevista para mediados de julio.
La ministra de Asuntos Exteriores sueca, Ann Linde, expresó su profunda preocupación por la decisión del régimen de aplicar la pena de muerte a Djalali, y añadió que Suecia y la Unión Europea condenan la pena de muerte y exigen la liberación de Djalali. “Se lo hemos dicho repetidamente a los funcionarios iraníes".

Extremely worrying media reports today that Iran may enforce the death penalty on Swedish citizen Ahmadreza Djalali. 🇸🇪 and 🇪🇺 condemn the death penalty and demands that Djalali be released. We have repeatedly stated this to Iranian representatives. We are in contact with Iran.

— Ann Linde (@AnnLinde) May 4, 2022

Ya a finales de 2020, el régimen de los mulás había vinculado el caso de Djalali con el de Assadollah Assadi y otros tres terroristas del Ministerio de Inteligencia iraní (MOIS), condenados por conspirar para hacer estallar un evento anual de la coalición opositora iraní, el Consejo Nacional de Resistencia de Irán (CNI), a celebrarse en París durante 2018. Assadi, un alto diplomático del régimen iraní con sede en Viena en ese momento, fue condenado a 20 años de prisión. Teherán había amenazado con ejecutar a Djalali a finales de 2020, para presionar a las autoridades belgas para que liberaran a Assadi. Tras la decisión del tribunal el 4 de febrero de 2021, Teherán convocó al embajador belga y expresó su descontento.
Para Bélgica, la condena de Assadi por un tribunal penal de Amberes y la sentencia de muerte del régimen iraní contra Djalali son asuntos separados, señaló la ministra de Asuntos Exteriores, Sophie Wilmès, en una audiencia de la comisión parlamentaria de Asuntos Exteriores el 2 de marzo de 2021.
Mientras Linde se encontraba en Washington DC el día miércoles para reunirse con funcionarios y políticos estadounidenses relacionados con la política exterior, el portavoz del Departamento de Estado de EE.UU., Ned Price, calificó la gestión del caso de Djalali por parte del régimen iraní como "un claro caso de detención arbitraria".
El ministro de Asuntos Exteriores del régimen iraní, Hossein Amir-Abdolahian, mantuvo el miércoles una conversación telefónica con su homólogo sueco, quien indicó que Teherán "considera ilegales la detención y el juicio de Hamid Nouri (en Suecia) y pide su liberación inmediata."
Esto demuestra la importancia del juicio de Noury para el régimen iraní, sabiendo que este precedente puede llevar a medidas similares por parte de diferentes países, lo que tiene el potencial de arrojar más luz sobre la masacre de 1988 y la gran extensión de las atrocidades cometidas por los mulás contra el pueblo iraní.