Las familias de los condenados a muerte exigen el fin de las ejecuciones en Irán
Quinto día consecutivo de protestas de las familias de presos condenados a muerte en Irán
Por quinto día consecutivo, las familias de los presos condenados a muerte en Irán, continuaron el domingo 11 de septiembre de 2022, con las protestas contra la pena de muerte y la ejecución de sus seres queridos.
Con cánticos de "No a la ejecución", las esposas de los presos bajo condena a la pena capital, las madres ancianas, los hijos y demás familiares, han celebrado concentraciones de protesta en Karaj y Teherán. Exigen a las autoridades judiciales iraníes que éstas sean detenidas.
Doce presos fueron ejecutados el 6 de septiembre, otros diez al día siguiente, en las cárceles de Gohardasht (Karaj), Bandar Abbas y Minab. Al menos 16 presos del corredor de la muerte, fueron trasladados al régimen de aislamiento el mismo día, para preparar la ejecución.
Muchos presos del corredor de la muerte, entre ellos 1.000 de la Prisión Central de Karaj, se enfrentan a una ejecución inminente. La orden del Poder Judicial de acelerar la ejecución de las sentencias de muerte, ha hecho que las familias de los presos condenados estén cada vez más preocupadas.
Las familias de estos presos condenados a la pena capital, en las cárceles de Karaj y Qezel Hesar, se reunieron ante el Tribunal Revolucionario de Karaj el martes 6 de septiembre de 2022. Quieren detener la ejecución de sus seres queridos y salvar sus vidas.
Iraj Fattahi, director de la Prisión Central de Karaj, dijo a las familias: "¡Sólo cumplimos órdenes! El poder judicial ha emitido la orden de ejecución".
El miércoles 7 de septiembre, las familias de los presos condenados fueron a Teherán, y se concentraron ante la oficina del Poder Judicial. Protestaron contra la cruel aplicación de las ejecuciones en las cárceles iraníes, incluidas las de Karaj y Qezel Hesar.
Más de 300 personas protestan desde el miércoles ante la oficina del Poder Judicial en Teherán, pidiendo una moratoria en la aplicación de la pena de muerte. Sin embargo, ningún funcionario de la judicatura acudió a escuchar las demandas de los manifestantes, ni a hablar con ellos.
Al tercer día, un manifestante se lamentaba: "Lo que han matado es suficiente. ¿Cuánto tiempo más debemos llorar a nuestros seres queridos? ¿Cuánto tiempo más van a matarnos y no debemos decir nada? ¿Merecemos ser pobres? ¿Alguien tiene conciencia de nuestra pobreza? Nadie quiere entender lo que significa no tener nada. Estamos de luto por los mejores hijos de nuestra patria. Estamos de luto. Nuestras ropas son negras. No queremos que maten a nadie más después de esto".
El domingo 11 de septiembre, las familias de los presos condenados a ejecución se reunieron inicialmente ante el parlamento de los mulás. Pero las Fuerzas de Seguridad del Estado (SSF) los enfrentaron y dispersaron. Entonces, las familias continuaron su protesta ante la sede del Poder Judicial. Las SSF detuvieron a varios de los jóvenes que protestaban.
En respuesta a las detenciones, las familias gritaron: "Estamos aquí para salvar la vida de nuestros seres queridos. Detenernos no es la respuesta correcta. Exigimos una reducción de las penas de muerte".
Las familias de los condenados corearon: "¡No ejecuten!".
El primer año de presidencia de Ebrahim Raisi ha supuesto un aumento significativo del cumplimiento de la pena capital, incluso de mujeres en todo Irán.
En menos de nueve meses de este año 2022, se han ejecutado al menos a 423 personas en Irán, mientras que en 2021 dicho número alcanzó los 366, y 255 a lo largo de 2020.
Al menos 23 mujeres han sido ejecutadas bajo el mandato de Ebrahim Raisi, desde que este asumió el poder, el día 3 de agosto de 2021.
La Resistencia Iraní insta a la comunidad internacional a tomar medidas para detener las ejecuciones en Irán.
